El delito de omisión del deber de socorro

El Código Penal recoge una serie de bienes jurídicos que hay que proteger y uno de ellos es el de la solidaridad humana. En este contexto es fácil entender que exista el delito de omisión del deber de socorro, que pretende castigar a aquellos que no son solidarios y asisten a una persona que se encuentre en una situación de peligro.

Normalmente el bien jurídico que hay detrás de la solidaridad humana es la vida o la integridad física.

La primera situación castigada por el Código Penal es la de aquel “que no socorriera a una persona que se encontrara desamparada y en peligro manifiesto y grave, cuando pudiera hacerlo sin riesgo propio ni de terceros”.

La segunda situación es aquella en la que, no pudiendo prestar socorro, no demande urgentemente auxilio ajeno.

Otro caso es aquel donde la omisión nace como consecuencia de un accidente ocasionado fortuitamente por quién luego omite el auxilio. Esto sería un caso agravado y se asigna mayor castigo, ya que es la propia persona que causó el daño quien omite el deber de socorro.

No obstante, sobretodo en accidentes de tráfico, el comportamiento de los Tribunales es bastante excepcional a la hora de condenar por estos delitos, a pesar de que los conductores se den a la fuga o se ausenten del lugar del accidente. Muchos Tribunales consideran que se trata de un comportamiento antisocial y acaban eximiendo de responsabilidad penal al imputado.

Indicar que el tipo más grave de omisión del deber de socorro es aquel en el que un profesional sanitario deniega la asistencia sanitaria o abandona a un paciente y posteriormente se deriva un riesgo grave para su salud.