Reclamación por lesiones sufridas dentro de un autobús
Cómo sabrán todos aquellos usuarios de autobús, a menudo es habitual que debido de a las sacudidas, frenadas, aceleradas o incluso colisión con otro vehículo u obstáculo a la vía, se produzcan pérdidas de equilibrio, golpes o caídas entre los pasajeros.
En la mayoría de los casos estos incidentes son de poca entidad y no se causan lesionas graves. Pero hay veces que debido a la intensidad del accidente o a las condiciones personales del pasajero (imaginamos una persona grande, una embarazada o un niño pequeño) las lesiones producidas pueden ser importantes y entonces se planteará la opción de reclamar una indemnización económica.
En primer lugar hace falta que el conductor haga constar por escrito el que ha sucedido. Si se trata de una colisión con otro vehículo hay que rellenar una hoja de accidentes o avisar a la policía para que haga el correspondiente atestado. En caso de que no haya implicado ningún vehículo más (imaginamos una frenada brusca ante un semáforo que provoca que un pasajero caiga en tierra y se haga daño) el conductor hará constar su versión por escrito.
De estos hechos habrá que dar conocimiento a la compañía de seguros, que será la encargada de indemnizar al pasajero, teniendo en cuenta todos los factores y circunstancias.
Para que la reclamación prospere es fundamental acreditar las lesiones mediante un informe de urgencias, así como un seguimiento médico de la recuperación. También es recomendable contar con una versión del conductor que reconozca la culpa o, como mínimo, testigos relevantes.
Hay que indicar que aunque se determinara que el pasajero ha tenido la culpa, en caso de tener como mínimo una fractura, siempre podrá reclamar indemnización por el Seguro Obligatorio de Viajeros.
A cariz de ejemplo, tenemos que indicar que en Badalona la empresa TUSGSAL está asegurada con Mapfre.
